Con el objetivo de garantizar que los pequeños negocios del sector de belleza y estética cumplan con la normativa de bioseguridad establecida en Colombia, protegiendo la salud tanto de los trabajadores como de los clientes, se referenciaran las siguientes recomendaciones a los emprendimientos CREA que tengan esta actividad, respondiendo a la Resolución 2827 de 2006, que adopta el Manual de bioseguridad para actividades cosméticas:
Descubre algunos de los tips más importantes para organizar tu negocio y brindar un servicio más eficiente
Uso de elementos de protección personal: Todo el personal debe usar guantes, mascarillas, gafas protectoras y ropa adecuada para evitar el contacto con agentes infecciosos.
Lavado de manos frecuente: Se requiere un lavado de manos antes y después de cada procedimiento y siempre que se manipulen elementos contaminados.
Esterilización de herramientas: las herramientas cortopunzantes (tijeras, cuchillas, etc.) deben ser esterilizadas o desechadas adecuadamente tras su uso para evitar la propagación de enfermedades. En caso de no contar con maquina esterilizadora, se recomienda lavar las herramientas en un recipiente con agua tibia y jabón, remojar 30 minutos en agua hervida con limón. Secar y en un recipiente cubrirlas con alcohol isopropílico durante 30 minutos. Luego dejar secar en una toalla de papel y guardar en un lugar seco y limpio, lejos del polvo y la humedad.
Los establecimientos deben implementar un plan para el manejo y disposición de residuos peligrosos, incluidos residuos cortopunzantes.
Los productos inflamables, irritantes y tóxicos deben almacenarse y manejarse de manera segura, con el equipo de protección adecuado.
Algunas de las sustancias químicas peligrosas que pueden encontrarse son:
Formaldehído: se utiliza en productos para el alisado del cabello y puede causar irritación en la piel, los ojos y las vías respiratorias. Además, se ha clasificado como cancerígeno para los seres humanos.
Tolueno: se utiliza en esmaltes de uñas y puede causar problemas respiratorios y daños en el sistema nervioso central.
Metacrilato de metilo: se utiliza en productos para las uñas acrílicas y puede causar irritación en la piel, los ojos y las vías respiratorias. Además, se ha clasificado como tóxico para la reproducción.
Capacitación del personal: todas las personas que hacen actividades en los espacios destinados deben recibir formación continua sobre medidas de bioseguridad, manejo de residuos y protocolos de emergencia
Uso de productos con registro sanitario: solo deben usarse productos cosméticos que tengan registro o notificación sanitaria otorgada por las autoridades competentes como el INVIMA.
Separación de residuos: los residuos deben ser separados en bolsas de alta densidad, clasificadas por tipo (biológicos, infecciosos, reciclables, ordinarios) y manipulados correctamente, por lo que se sugieren los siguientes colores:
Residuos de cabello, uñas, recipientes vacíos de desinfectantes, toallas y guantes con remanentes de productos químicos.
Residuos ordinarios.
Botellas, cartón pequeño y plásticos limpios.
Almacenamiento adecuado de productos: todos los cosméticos deben mantenerse en su empaque original y almacenarse en un lugar fresco y seco.
Revisión periódica de equipos: los equipos utilizados en los tratamientos deben ser revisados y mantenidos en buenas condiciones para asegurar su correcto funcionamiento y desinfección.
Salas sanitarias y de descanso: es fundamental proporcionar desinfectante de manos, jabón líquido suave y toallas desechables. Se debe mantener un alto estándar de limpieza e higiene en todo momento. Además, es recomendable ajustar los intervalos entre clientes para garantizar la desinfección adecuada del establecimiento.
Registro de limpiezas: debe llevarse un registro detallado de todas las limpiezas y desinfecciones realizadas en el establecimiento, indicando el responsable y los productos utilizados.
Espacio del área de la estación de trabajo: ajuste la cantidad de estaciones de trabajo para mantener una distancia de al menos 2 metros entre los clientes, esta distancia debe mantenerse en todas las direcciones alrededor de cada lugar de trabajo. Sólo el cliente y el empleado responsable pueden acercarse entre sí durante la duración de las actividades de peluquería.
Los espacios deben estar adecuadamente ventiladas, incluso en condiciones climáticas desfavorables. Esto reduce cualquier riesgo de infección.